¿Cómo es el consumo de queso en España?
Analizamos algunos de los últimos datos sobre el consumo de queso en nuestro país. Así es cómo comemos queso en España y cómo lo vamos a comer.
A los españoles nos gusta el queso, mucho y muchos tipos. Según los últimos datos estadísticos de estudios enfocados al consumo de queso en España, todas las variedades tienen su cuota de consumo, pero es el queso fresco el que últimamente lidera los ránkings, este queso es responsable del 25,3% de la demanda, un elevado porcentaje respecto a las estadísticas de años anteriores. El consumo de requesón -alto en proteínas y bajo en grasas- ha aumentado hasta un 29%. El resto de cuotas están muy fragmentadas, lo que nos da una idea del rico y surtido panorama quesero de nuestro país, que es capaz de concordar con gustos de lo más variado.
En líneas generales, el consumo del queso en hogares se viene consolidando desde mediados de 2016, esta etapa de crecimiento favorece la aparición de más marcas y productores de queso, lo que contribuye de sobremanera a aumentar la amplia carta de quesos que tenemos en nuestro país.
Las tendencias van hacia lo ecológico, a disfrutar de nuevas experiencias queseras pero sin olvidar ni renunciar al placer que producen los grandes quesos clásicos, con todos sus matices y sus elementos naturales. Para los productores, este es un momento de cumplir con un reto: proteger y se potenciar la salud, tanto del consumidor, como del entorno, el medioambiente, los pastos y los animales de los que procede la leche, asegurando siempre la máxima calidad posible.
Los quesos españoles de pasta prensada son la segunda categoría en popularidad. Su demanda en el supermercado alcanza un 21,6%. Este tipo de queso se consume sobre todo en lonchas y las cuñas, un formato muy apreciado entre los consumidores por su conveniencia y comodidad. De entre los distintos puntos de maduración, el semicurado es el más adquirido por los consumidores.
El pasado 2017, el consumo por persona de queso fue de 7,66 kilos al año, un cifra que, según los meses transcurridos del 2018, va a mantenerse estable. Los principales productores de queso observan que esa cantidad de consumo va a estar compuesta por la entrada de nuevas variedades y nuevos sabores. Además, la demanda de formatos prácticos y envases útiles son una de las tendencias más claras para el próximo año. Los profesionales de la industria quesera resaltan el interés de los consumidores por ampliar la paleta de variedades y tipos de queso que conocen. Está claro que hay una variedad de queso para cada momento y para cada persona.
En cuanto a los datos relativos exclusivamente a los quesos con Denominación de Origen Protegida e Indicación Geográfica Protegida, en el pasado 2017 comercializaron en su conjunto en torno a 26.000 toneladas de quesos. De esta cifra, la mitad correspondió a la DOP Queso Manchego.
Las otras DOP con más comercialización fueron la Arzúa-Ulloa (el 13% del total), la DOP Mahón-Menorca (9%), la DOP Queso Tetilla (5%) y la DOP Idiazábal (4,8% aproximadamente).