Guía de cuchillos para cortar queso

Si eres un auténtico quesero, lo sabrás. No todos los cuchillos valen para cortar queso. Cada queso, con su textura, es diferente y requiere la herramienta adecuada para no perder ninguna de sus propiedades, aprovechar al máximo la pieza y no destrozar el queso mientras lo partimos. Y es que no es lo mismo cortar un queso de pasta blanda que un manchego curado. A la hora cortar queso, estos son los utensilios más utilizados y los tipos de queso a los que acompañan.

Lira
A la lira también se le conoce como cuchillo de alambre. Se usa para quesos blandos.  Su corte es limpio, lo que permite que los quesos de textura frágil como los azules queden perfectos al evitar que se rompan y se desmenucen.

Cuchillos con hoja perforada
Este cuchillo sirve para cortar una gran variedad de quesos, tanto blandos y cremosos como semiduros. Es el cuchillo más común que encontramos para uso doméstico debido a su versatilidad. La hoja, ancha y perforada, está diseñada para ofrecer la menor resistencia a la horma del queso y evitar que el queso blando se quede pegado como sucede con otros cuchillos. La hoja del cuchillo suele terminar en punta para facilitar el marcado desde el centro del queso hasta el borde presionando suavemente. Da un corte limpio y con poco esfuerzo.

Cuchillo de doble mango
Este cuchillo es el que más se utilizan en tiendas especializadas para cortar quesos duros o semiduros, aunque no es tan habitual tenerlo en casa. Son quesos curados que requieren de una hoja más consistente para cortarlos con firmeza.

Cuchillo tipo pala o laminador
Sirve para cortar en lonchas tanto quesos blandos de horma pequeña. La hoja de la pala tiene el filo indicado para realizar un corte preciso y con un mínimo esfuerzo.